En un mundo tan avanzado tecnológicamente
resulta increible los enigmas sin resolver que nos rodean. Lugares de leyenda,
mundos y seres mitológicos, apariciones inexplicables, descubrimientos
terroríficos, misterios que nos apasionan.

Acércate al blog que se adentra en
el lado más oscuro de la dimensión humana.....






miércoles, 20 de febrero de 2008

Barrabás, inocente o culpable

Los autores de los Evangelios se muestran muy cautos en la identificación de Barrabás, el hombre cuya liberación exigió la multitúd judía, en lugar de Jesús.
¿Quién fue Barrabás, y por qué Pilatos ofreció liberarlo en lugar de Cristo?. Lo habitualmente aceptado es la posibilidad menos satisfactoria. La supuesta existencia de la tradición de liberar a un reo en Pascua, tal como nos cuenta la Biblia, no está demostrada documentalmente en aquella provincia romana. Los investigadores coinciden en que jamás existió el privilegium paschale.
El gran problema que presentan los Evangelios es el no explicar quien era Barrabás. Se le tilda de prisionero notable, de insureccto, de asesino, ladrón. De las referencias evangélicas se deriva que estuvo inmerso en una insurección. Pero los textos sagrados no señalan claramente que hubiese tomado parte activa en la misma. Por otra parte, ningún gobernador se hubiese atrevido a liberar a alguien que aguardase proceso o hubiese sido ya condenado. Ese privilegio estaba reservado al Emperador.
Otra pista procede del nombre de Barrabás. Este no es un nombre completo; se trata de un patronímico, o apodo. Deslindado en dos palabras "Bar Abbas", significa el hijo de un "Padre", maestro de la Ley, tal vez un miembro de la jerarquía sacerdotal. Y su otro nombre fue, al parecer, Jesús. En muchos códices antiguos de la Biblia, se le llama "Jesús Barrabás". ¿No pudo ser que este Barrabás fué arrestado por confundirlo con el otro Jesús? Su ofrecimiento de libertad, habría sido pués, un intento de identificar al acusado de pretender ser el rey de los judíos, rival del César.
Los Evangelios, que redactaron sus escritos cincuenta años más tarde de tales sucesos, trastocaron el episodio, y a fin de mancillar a los judíos, los acusaron de haber exigido la muerte de Jesús, cuando ellos liberaban a un hombre arrestado por equivocación.