La pedofilia no tiene ninguna relación con la orientación sexual, bien sea hetero o gay, sino con la opresión sexual de los adultos sobre los niños. La exigencia del celibato de los sacerdotes tampoco tiene nada que ver con la devoción al Todopoderoso sino con la búsqueda de riqueza y poder.
Hasta los siglos XI-XII, se les permitía a los sacerdotes católicos mantener relaciones sexuales con mujeres y amantes. Incluso tener propiedades y legarlas a sus hijos. Posteriormente la Iglesia prohibió a los hijos heredar, de manera que las propiedades pasaran a la Iglesia. Más tarde se prohibió el matrimonio y que tuvieran amantes. Finalmente en 1139 anularon los matrimonios contraídos y obligaron a los nuevos sacerdotes a divorciarse.
La Iglesia Católica no se ha convertido en una de las instituciones más ricas y poderosas del mundo por se fiel a su propio credo. Ni tampoco ha logrado todo esto con el juego limpio.
En los casos de abuso sexuales se hallan involucrados sacerdotes y miembros de órdenes religiosas católicas. Se suelen dar en seminarios, escuelas y orfanatos, donde los niños estaban al cuidado del clero. Muchos miembros de la alta jerarquía de la Iglesia Católica se dedican a encubrir estos casos para que no salgan a la luz. El mayor castigo que suelen dar es el traslado de estas personas a otras diócesis, donde, claro está, reinciden en sus prácticas sexuales.
Aunque se estima que el 99% de los sacerdotes no ha incurrido en pedofilia, es cierto que los que han caído en la tentación tenían fácil acceso a los niños. La Iglesia se defiende argumentando que estos casos no son más de los que se suelen dar en cualquier otra institución. Pero ¿La Iglesia Católica es comparable a cualquier otra Institución?
1 comentario:
Me gustó mucho tu blog... me voy a pasar mas seguido por aca ;)
Te puse un enlace en mi blogroll.
http://codigoycolores.blogspot.com/
Publicar un comentario